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sábado, 26 de marzo de 2011

"Así que era verdad que algunos pensamientos se hacían realidad"pensé(Sasha)


Capítulo 5
Ese día estuve con hiperactividad toda la tarde,dando vueltas por mi planta,no encontraba Rubi,y dios no lo quiera,podría encontrar a Vito otra vez y preguntarle cosas...me sorprendía que el no hubiera matado a nadie en el hospital y no lo tuvieran encerrado,realmente lo deseaba,me daba coraje que no pudiera apartar los ojos de el...era como si,no sé como,no un no puedo y un no quiero aunque sabía que debería dejar de mirar,y el se burlaba de mi por eso,yo no es que fuera muy atrevida pero,yo no me podía arrepentir de eso.
Finalmente desistí cuando vi que no encontraba a Rubi y me fui a mi cuarto,empezaba a oscurecer,entonce me acordé de las palabras de Joel,el me vería esta noche,para hacerme inmortal ¿no?,yo,bueno,yo si quería ser inmortal pero,me daba miedo probar a ver como todos mis seres queridos se morían y yo seguiría hay,¿ellos sabían que yo era portadora del VIH y lo de mi enfermedad?,en tal caso¿pensaban que aún así podrían convertirme en un ser inmortal?.Me recorrió un escalofrió,hoy volvería a sentirme incapaz de moverme cuando le viera y yo,bueno,ellos habían decidido lo de hacerme inmortal,y yo no sabia si quería o no...¿una persona normal diría que si, no?.
Suspiré y me metí en la cama,hacia un poco de fresco,sin querer me quedé dormida,para cuando desperté,era bien entrada la noche,me dolía un poco la garganta “¿estará ya el despierto?”pensé,alguien llamó a la puerta y me sobresalté,de pronto temblaba,miedo,si yo tenia miedo ¿por qué?...mis pensamientos se pararon cuando Joel abrió la puerta y sus ojos me pillaron desprevenida,eran tan,tan,hermosos y podía imaginarme que eso que notaba por mi mejilla era sangre:
-No...-susurré tocándome la mejilla. Me tapé los ojos con las manos.
-Ven-dijo el,con una voz que me hizo levantarme e ir hacia el antes de que yo hubiera pensado lo que el había dicho,el me lo había ordenado y mi alma le había obedecido...Me paso una mano por la cintura y caminó llevándome ami con el,su tacto esta vez no hacia mucho efecto porque llevaba ropa,no quería imaginar que pasaría si tan solo se me subiera la camiseta un poco y sus dedos llegaran a rozarme,seria el apocalipsis ...Llegamos al parque de la última vez pero no salimos,me puso contra la pared de cristal y se acercó a mí como la última vez,yo había estado desde el principio de mi encuentro con el sin poder hacer cosas por mi misma,todo habían sido ordenes de el que yo ejecutaba,sin yo quererlo:
-¿Qué vas a hacer?-dije bajito.
-Voy a besarte,-dijo el y tocó mi pelo con una mano,me sonrojé-Así te convertirás en un ser inmortal ,deberías estar feliz.
-Estoy nerviosa,-admití ,noté presión,el me tocó la cara como dándome un poco de esa magia temporal y volví a sentirme bien.
-¿porqué yo?-dije mordiéndome la lengua,no había podido evitar preguntar. Para mi sorpresa el se encogió de hombros y me sonrió.
-yo no te elegí,lo entenderás después de que te convirtamos-dijo el y se acercó más ami.
-¡espera!,yo quiero entenderlo ahora, ¿porque tanta prisa que ni siquiera me habíais preguntado si yo quería esto?.
-Normalmente no rechazan esto,¿acaso no quieres vivir eternamente?
-Claro que quiero,pero...
-Yo creo que te vas a poder acostumbrar a estar viviendo aunque los demás vayan a morirse ,yo también pensé eso antes de que me convirtieran-hizo una pausa sonriéndome,el estaba feliz,más que yo ,bueno,yo no estaba feliz de hecho-creo que quizás quieras estar conmigo después de convertirte-se pasó la lengua por el labio y puso los dos brazos a los lados de mi cara,estábamos apoyados en la pared de cristal.
-pero creo que tengo dudas aún sobre esto...y esto no tiene vuelta a tras una vez que se hace ¿no?.
-Exacto,vas a quedar muy bien cuando estés convertida,-me dijo a la vez que me tocaba un lado de la cara con una de sus grandes manos,me puse colorada,el realmente era guapo y la forma en la que me miraba,con esos ojos y ese pelo,era un príncipe -la verdad es que no te queda el tiempo suficiente como para que te lo expliquemos todo-hizo una mueca levantando solo un lado de la boca al sonreír.
-¿no me queda tiempo?
-si-dijo el amargamente-no mucho,dentro de poco empezarás a enfermar,me niego a verte así antes de convertirte-mi cara debió sorprenderle cuando me volvió a mirar.
-Pero...aun me quedan cosas por hacer-gemí.
-no es que vayas a morir,puedes vivir,-se acercó a mi y cogió mi cara entre sus manos-yo voy a darte la vida eterna-casi me quedé sin respiración mi cabeza era un remolino de emociones,le empujé lejos de mi:
-yo no quiero esto-me miro decepcionado.
-¿sabes lo que estas rechazando? Una vez que digas no,sera un no para siempre,no habrá una segunda oferta,también me estarías rechazando a mi-hizo una mueca.
-para mi es peor vivir eternamente que morir como una humana,yo no quiero ser anormal.
-sabes que esto es un capricho tuyo ¿no?-me cogió una mano-los síntomas de su presencia volvían poco a poco.
-lo sé,gracias,yo...
-será mejor que no digas nada – me cortó el y hicé una mueca
-lo siento.
-vas a lamentar esto-más afirmándolo que amenazando,y si lo lamentaría mucho,dijo a la vez que soltaba mi mano me miró con decepción,el había esperado mas de mi,el quizás incluso pensaba que ami me daba miedo pasar por esto...mis ojos se llenaron de sangre otra vez,me derrumbé en el suelo ,dolor,eso era lo que sentía ahora,en mi corazón y en mi cuerpo. Joel se giró y rompió el cristal que separaba el pasillo del patio de un puñetazo,ni siquiera se hirió la mano.
Me desmayé en el suelo,rodeada de cristales,había perdido demasiada sangre,a través de mis ojos,para cuando desperté ,estaba en mi cuarto,en mi casa,escuché a mis padres y a la médica hablar en el sofá,las cortinas de mi cama estaban cerradas,pero una tenue luz se podía ver por el punto de separación de ellas:
-creo que ya hemos demostrado que mi hija no se drogaba-dijo mi padre con voz gruñona.
-lo sentimos de verdad,puede que fueran reacciones del Sida-dijo ella,sentí un escalofrió. Entonces abrí las cortinas:
-Buenos días-anuncie tenia la voz un poco tomada y moqueaba un poco. La médica me miró con preocupación.
-Vendré cada vez que pueda para hacerle un chequeo a Sasha.
-Por supuesto-dijo mi madre-Gracias.
Mi padre se levantó y se fue con la médica para acompañarla:
-Mama quiero pediros una cosa a papá y a ti-dije seria,mi madre me miró con el ceño fruncido.
-¿Qué quieres?
-Quiero que...bueno,escuché de los médicos que no viviré mucho,eso son meses o años ¿no?-mi madre hizo una mueca intentando no llorar y se tomó unos segundos para relajarse un poco.
-unos meses-afirmó mi madre,yo asentí.
-yo,quiero...mamá yo quiero ir al colegio,salir a la calle,hacer amigas,aprender a patinar...-hice una pausa cuando se me escapó una lagrima-yo quiero ser en estos meses todo lo que no he sido en la vida.
-Sabes que no deberías-me advirtió mi madre,su voz empezaba a temblar.
-yo quiero hacer lo que todo el mundo hace,mamá,¡yo quiero ser normal,joder!-el viento sonaba golpeando alguna ventana abierta del piso de abajo-yo quiero...aprender a patinar,hablar con las abuelas,tener novio,estudiar en un instituto...joder,¡quiero ponerme brackets!.
-la verdad te vendrían bien-dijo mi hermano entrando por la puerta.
-Sasha,tu vida se acortará si sales de aquí,allí están todo tipo de enfermedades,en el aire y tu,tu no puedes estar con chicos podrías transmitirles el VIH-mi madre entrelazaba las manos y las volvía a separar nerviosamente,me acerqué a ella y la abracé.
-Me da igual,esto no es vida-mi madre empezó a llorar en mi hombro,yo me quedé allí,sabia que para ella era más difícil que para mi,yo que ya me había mentalizado de morir ya solo quería disfrutar,aunque eso me restara vida.
-Yo creo que si ella lo quiere así está bien-dijo mi hermano.
-dejaré que tu padre lo decida -dijo mi madre,limpiándose las lágrimas de la cara,estaba enfadada con los labios apretados llenos de frustración porque ella sabia que yo tenia razón,que yo podía elegir eso y si lo hacia era justo.

Después de esa conversación,escuché a mis padres pelearse,eran contadas las veces en las que lo hacían pero,ami me asustaba que llegaran a separarse,mi padre como era un hombre justo acepto y coincidimos en que fuera en un colegio de aquí cerca el que por casualidad era para gente adinerada y seguramente podría tener buenos tratos médicos,me apuntaron ese mismo día y me compraron el uniforme,estaba feliz,un uniforme eso era lo que todas las niñas que estudiaban tenían y ahora yo tenia uno,por fin,aunque me preocupaba un poco la impresión que yo podía dar a la gente,quería parecer simpática y estar con un grupo de amigas,no muy grande y conocer un chico y...eso. Después de almorzar mi madre me llamó:
-Mañana empieza las clases pero la condición es que practiques todos los días con los patines,-me los dió -ve a la pista,ella te esta esperando-dijo mi madre ásperamente,ella aún estaba enfadada y ami me parecía que cada vez me miraba con más asco o repugnancia,¿como podía ser ella así? Ella hubiera hecho lo mismo.
-vale-subí a mi cuarto y me puse unos calentadores y una falda lilas y una camiseta de manga larga blanca que tenia el dibujito de un elefante lila,después salí de la casa camino de la pista,estaba saliendo de la entrada a la izquierda,se podía ver una cúpula no de tamaño colosal pero grande .Abrí las puertas oxidadas que chirriaron cuando las empujé,la pista ante mi. Solo había entrado tres veces, con intentos fallidos de aprender,mi máximo,3 segundos sin caerme creo,la pista era la mitad de grande que un campo de fútbol aproximadamente,una chica de mi edad estaba en el medio de la pista con los patines,era guapa,muy guapa con el pelo rubio liso que le llegaba hasta las caderas,con flequillo por encima de los ojos estaba en una posición complicada para mi,con los brazos hacia arriba y los ojos cerrados concentrada con la cabeza mirando hacia el techo y su cuerpo estirado hacia arriba hasta la punta de los patines,parecía un pájaro que iba a echar a volar en cualquier momento,llevaba una falda corta azul marina y una camiseta de tiranas del mismo color,era delgada y seguramente todos los chicos se morían por sus huesos.
Volvió a una postura sencilla con los brazos hacia abajo y me miró,sonriéndome,¿sabría ella todo sobre mi?,me puse los patines y me acerqué a la entrada de la pista dudando,ella también se acercó:
-Hola,soy Sasha -me presenté tímidamente.
-Diana-dijo arrogantemente pero su rostro era calmado,ese era su carácter uno arrogante,ami por lo general,no me caían bien así que le dediqué una mueca y puse un pie dentro de la pista para cuando puse el otro e caí de culo y me golpeé con el hierro de la barandilla-¿Estas bien?-me preguntó ella dándome una mano,la cogí.
-si,gracias-dije muerta de vergüenza,ella se estaba riendo por dentro-nunca se me ha dado bien patinar-añadí.
-bueno,solo tienes que relajarte-me agarré a la barandilla para no caerme otra vez-nosotras tenemos la misma edad ¿no?-asentí-yo tengo dieciséis.
-y yo
-cuando empecé a patinar tan solo tenía seis años,-se encogió de hombros-yo nací para esto,se me da bastante bien-dijo riéndose-te enseñaré,pero,tienes que poner de tu parte porque si no te separas de la barandilla no vas a aprender nunca ¿sabes?-me tiró del brazo y aunque me balanceé un poco no me caí y permanecí a su lado quieta.
-Es que me voy a caer,yo creo que necesitaría dar unas vueltas agarrada a la barandilla antes de empezar por al pista yo sola-opiné y ella me levantó una ceja,claramente en desacuerdo y se rió en mi cara.
-Ni hablar,¿pero que dices? Eso hazlo cuando yo no este,además la que dice lo que vamos a hacer aquí soy yo ¿vale?-dijo ella,¿ya se había enfadado? Que poca paciencia...suspiré y la miré.
-Entonces,¿qué hago?
-Patina-dijo ella moviéndose hacia atrás de espaldas mirándome-hacia donde quieras,en cualquier dirección.
No protesté y moví un pie hacia delante dándome un impulso,inmediatamente no supe como mantener el equilibrio y me caí,ella vino riéndose y me ayudó a levantarme.
-Intentalo otra vez.
Lo volví a intentar y cada vez que lo hacia daba dos o tres pasos hasta que no aguantaba más el equilibrio,ella insistía en que me levantara e incluso me ayudaba,me observaba divertida,eso me jodía bastante. A la décima vez que me caí me dijo:
-Piensa,¿cual es el problema?.
-¿Cual?-dije y me encogí de hombros.
-He dicho piensa.
-el equilibrio,creo,no puedo aguantar sin que me tiemblen las piernas repuse. Ella alzó con las manos hacia arriba y asintiendo con la cabeza como implorando a dios,me reí en verdad ella era graciosa.
-otra vez.
Volví a intentarlo varias veces más intentando que mis pasos fueran más estables,aunque me tambaleaba,intentando no caerme. Diana pululaba cerca de mi dándome pequeñas explicaciones de las posiciones más cómodas para deslizarme por el hielo,cuando las seguí me fue un poco mejor,primero un pie,me deslizaba hacia delante y después el otro,iba un poco más rápido,ahora temblaba menos.
-bueno,bueno,hay que dejarlo ya-dijo Diana.
-ya me sale mejor-dije contenta.
-ya,pero sigues siendo penosa-se empezó a reír,me estaba acostumbrando a sus borderias.
-lo sé pero un poco menos ahora,he conseguido temblar menos-me puse dentro de la pista pero apoyada en la barandilla,ella salió de la pista y se quitó los patines en un banco que había delante de la entrada de la pista:
-¿No te vas?-inquirió ella.
-No,voy a quedarme un poco más-dije,quería hacer lo que ella hacia y sentirme como un pájaro como ella hacia.
-Entonces te daré un consejo: No tengas miedo de caerte,cuantas más veces te caigas mejor,le cojeras el truco para no hacerte daño y dejaras de tenerle miedo,entonces patinaras libre-me sonrió,creo una amable, “OMG” pensé y me reí.
-Gracias-ella rodó los ojos y se echó su mochila a la espalda saliendo de la pista-y hasta mañana-dije,ella movió su mano despidiéndose. Cuando sonó una puerta chirriando supuse que se había ido y volví a intentarlo:
-Yo puedo-me susurré ami misma y me deslicé varias veces,cada vez temblaba menos y ya no me caía,cuando conseguí ir mas o menos rápido sonreí y extendí las manos,entonces me caí de boca y se me hinchó el labio un poco,me senté en el hielo y suspiré,estaba frió,agradable y me recordaba a Moscú pero yo no debía estar ay yo debía estar arriba intentándolo más veces,me levanté,¿mi abuela había intentado patinar y le había pasado lo mismo?,quité los pensamientos tristes de mi cabeza y me levanté,ahora me daba un poco de cosa volver a caerme y iba otra vez más lento pero poco a poco empecé a ir más rápido y no me caía,de momento claro. Le dí unas cuantas vueltas a la pista bordeando las esquinas,me imaginé a una de esas patinadoras tan flexibles que daban vueltas a toda velocidad,ami me encantaría hacer eso ¿llegaría a hacerlo antes de...?,la puerta chirrió un poco,el viento quizás,de hay el escalofrío que me llegó por la espalda, en una de mis ideas locas patiné hacia delante y intenté girar,puse un pie delante del otro y lo deslice hacia detrás acompañé el cuerpo y conseguí que mi cuerpo se girara y patinara hacia atrás,se me iluminó la cara,había estado muy bien,sentir la brisa bresca a toda velocidad ami alrededor,la puerta crujió más y perdí la concentración cayéndome de espaldas,escuché unos fuertes pasos,mi madre no podía ser desde luego,miré hacia arriba desde el suelo de hielo,un chico un poco mayor que yo me miraba,con los ojos muy abiertos:
-¿estas bien?-inquirió,asentí con la cabeza,este debía ser el jardinero,y vaya,espero que mi madre no tuviera un royo con el ,porque cualquiera se le resistiría,era guapo con los ojos azules agua y el pelo rojizo liso,el pareció mirarme solo la cara,mientra que yo le examine el cuerpo entero mientras me levantaba otra vez,y estaba bastante bien,con los hombros anchos alto,delgado y elegante:
-Me llamo Leo,¿y tu?-me sonrió con amabilidad.
-Sasha -dije-tampoco ha sido para tanto la caída,estoy aprendiendo-dije riéndome tontamente.
-¿vas a ir al instituto?-me preguntó,¿como lo sabia el? Era normal que todos fueran.
-claro como todos.
-tu no eres como todos-dijo el,yo me reí,¿estaba ligando conmigo?.
-no,no lo creo,¿y tu?
-yo voy a la universidad-dijo el.
-eres mayor entonces-dije de broma.
-si,más que tu.-me lanzó una mirada seductora “OMG,OMG,OMG...”pensé.-¿Cómo se llama tu instituto?- me preguntó.
-Manitowa,lo han hecho cerca de la universidad de Manitowa.
-Yo voy a esa universidad,-me sonrió-trabajo en esto porque me gusta hacerlo y me relaja-me explicó-creo que tu me entiendes-dijo el y se puso un poco rojo.
-Si,en parte-dije,de repente me puse nerviosa,Leo me miraba con una sonrisa,aún seguía apoyado en la pared de hierro,su pelo era hermoso y los grandes focos de la pista parecían iluminarle a el,los ojos azules agua se veían a kilómetros de distancia y era tan guapo,sin duda el sería el chico por el que me iba a morir intentando salir con el para pasar el tiempo que me quedaba. Se movió y se me pusieron los pelos de punta de los nervios,parecía que se me iba a salir el corazón,yo también le miraba embobada.
-Ha llegado un camión-dijo el-¿habéis comprado algo?
-No,bueno,creo,a lo mejor mis padres si -me reí tontamente el sonrió.
-Me voy a trabajar-me respondió el antes de que yo dijera nada más para sacar tema. Le dediqué una sonrisa,para mi sorpresa el me la devolvió.
-Nos vemos.
Él se giró y se fue,hacia frío ahora que lo pensaba me pase una mano por el brazo,miré el reloj en la pared,era las 3 y media de la tarde seguramente ya era hora de almorzar,aún tenia ganas de patinar,nunca hubiera pensado que pudiera ser tan satisfactorio,solo me faltaba música,si,era una buena idea. Después de quitarme los patines y salir me quedé en la entrada,había cinco hombres llevando un piano de cola blanco,con los pedales plateados y dónde creo que se ponían las partituras también era plateado ,el piano brillaba aunque el cielo estaba nublado. Me quedé con los ojos desorbitados mirándolo,se me cayeron los patines,un piano,yo siempre había querido uno,¡era increíble!,¿en serio iba a estar en mi casa? Yo quería aprender a tocarlo,mi madre se acercó ami casi corriendo:
-cariño,¿que te pasa? ¿te encuentras mal?
-¡no!,¿este piano es nuestro?-dije más para mi misma que para ella.
-claro,te lo ha regalado tu tío para tu cumpleaños-me quedé sorprendida,no lo había recordado,mi cumpleaños había pasado.
-¿para mi? ¿entonces es para mi?-dije casi chillando.
-claro,claro-dijo mi madre al darse cuenta de lo feliz que yo me estaba poniendo.
-Me encanta-dije y me puse a saltar como una niña chica.
-Eres una cría -dijo mi hermano abrazándome desde atrás.
-¡y soy la más afortunada del mundo!-dije y mi madre me dedicó una amplia sonrisa,mi padre estaba ayudando a los hombres a meter el piano dentro de la casa me miró sonriendo,ahora parecíamos una familia feliz,me consideraba afortunada de que mi familia nunca hubiera sido de las que estaban continuamente peleándose y llevándose mal,nosotros eramos todo lo contrario quizás porque sabíamos que no íbamos a tener todo el tiempo de nuestras vidas,como todo el mundo. Quizás en las familias normales era normal pelearse.
El salón me pareció más bonito cuando vi el piano en el,las ventanas que llegaban hasta el suelo a un lado de la habitación,el techo abovedado de ventanas,que cuando llovía a través de un sistema de máquinas que tapaba el techo si nosotros queríamos,el sillón y la tele pegada a la pared en el centro,la sala rectangular y al otro lado de la habitación una mesa dónde comíamos,ahora el hermoso piano,al lado de las ventanas,podría a ver llorado de la emoción,encima de la mesa había algunas partituras de piano y algunos libros.¿Se suponía que yo iba a aprender?.
-¿Qué te parece?-me preguntó mi padre.
-Es muy bonito-dije casi eufórica.
-Me alegra que te guste-dijo el,alguien entró en la habitación-además de jardinero es un buen pianista,creo que te enseñara bien.
Me quede callada sin podermelo creer ¿mi profesor?,iba a pasar mucha vergüenza,desde luego,porque yo era más que torpe.
Leo me sonrió ahora su cara era más que simpática,parecía divertido con cierta macabravez, naah,eso eran imaginaciones miás,lo de Vito me había dejado trauma.
-Ya le conozco...
-Bien,bueno,os dejo solos-iba a dar un paso para alejarse pero se giró para mirarme-aprovecha esto ¿vale?,debes esforzarte-me dijo yo asentí y después el se fue cerrando la puerta detrás suyo.
-Vaya,hoy tengo un día lleno de sorpresas-dije y me reí.
-Me alegro-dijo el se acercó al piano y levanto la tapa-¿escuchas canciones de piano alguna vez?
-algunas-dije “bastante “pensé”.
Empezó a tocar First Love,me quedé tonta,la tocaba poniendo un sentimiento inocente y puro en cada nota,su cuerpo acompañaba el movimiento de sus brazos y cuando acabo,yo tenia ganas de saber tocar igual que el,yo estaba decidida a hacerlo. Esperaba que tocar esa canción no hubiera sido una indirecta porque eso me pondría muy nerviosa y no me iba a facilitar aprender delante de el a tocar el piano.
-Ahora tu-dijo el sonriéndome.
-¿que quieres que haga?- dije asustada y me acerque al piano,el se levanto de la silla(que no tenia respaldo) y yo me senté.
-¿sabes tocar?-doble la cabeza y me encogí un poco de hombros.
-Sé donde tocar pero eso del ritmo y no pararme me es...difícil-imposible,estaba casi tartamudeando. El me miraba sonriendo.
-Bien,esta supongo que es difícil para ti entonces,cogió una partitura en al que ponía:Spirited Away - The Name Of Life.
-¿Voy a tocar eso?-el asintió,se me hacia difícil imaginarme que yo pudiera por la cantidad de notas tan pegadas aunque no mucho al principio,no iba a ser tan malo en verdad.
Se puso a explicarme cosas sobre el ritmo que se indicaba donde ponía cosas como el allegro y cosas así y me explico más cosas sobre los matices y de más,después me dijo que empezara poniendo me pequeñas metas y que tocara el principio hasta que me saliera bien y que después siguiera así con todo lo demás,toque el principio bien,en lo referido a las notas,sabia como iba eso de las escalas en el piano,y por la lección de teoría que el me había dado(de una hora creo)sabia como era el ritmo y lo que debía hacer con los matices y los pedales,pero el ritmo era amorfo y yo que solo había tocado el piano en primaria ahora no me veía capaz de más.
-Es imposible...-susurré para mi misma.
-te he escuchado-me regañó el con sorna y me miró profundamente,otra vez esos ojos soñadores se fijaban en mi,me puse nerviosa y ahora si que no me concentraba nada-tu puedes hacerlo,necesitas practica-dijo el-bueno minipianista me he excedido en cuanto a tiempo enseñándote y se ha hecho tarde,te dejo aquí unas cuantas si te cansas de intentarlo con esta ,mañana te enseñaré un opening con el piano,te va a encantar-me aseguró yo sonreí ampliamente aunque estaba un poco avergonzada por ser tan mala tocando el piano.
-Vale,eh...gracias por tener paciencia conmigo-dije riéndome.
-¿porque?,al contrario as memorizado toda la teoría muy bien y cuanto más lo repites mejor lo haces la siguiente vez,eres una alumna excelente-dijo el sonriéndome-te veo mañana ¿vale?-se acercó ami y se me disparó el corazón,me beso la frente,su beso cálido se quedó ay grabado,esa noche me costaría dormir.
-Vale-tartamudeé,el se fue,era tan agradable estar con el,cuando estaba conmigo me sentía acompañada y totalmente feliz,aunque también era que estaba teniendo un buen día. Feliz,volví a insistir con el piano,mi madre entró y empezó a poner la mesa,estaba sonriente, después entro mi padre y se hecho en el sofá,me preocupó que intentara domir tranquilo y yo le molestara pero su cara también era de tranquilidad y felicidad,parecía que empezaba a poder manejar el principio de la canción,cuando lo conseguí empecé a respirar rápido pero no hice mucho ruido porque mi padre estaba dormido,después de cenar(que fue una de las mejores cenas que tuve porque me pusieron mi comida favorita y además todos estaban felices de nuevo),mis padres se subieron temprano y entonces les apagué la tele y me fui a tocar el piano otra vez,mi hermano se subió a su cuarto en cuanto vio que estaba tocando el piano,puso los ojos en blanco y me dio las buenas noches,el era más del hardmetal.
Estaba como obsesionada con el piano,quería tocarlo y estar toda la noche,cuando por fin podía tocar la canción entera,eran las 4 de la madrugada,la canción era hermosa y misteriosa,retumbaba por toda la casa,y aunque seria como una nana para un bebe,no quería despertar a mis padres,en realidad no tenia sueño,porque estaba deseosa de coger el piano otra vez pero me acordé de que iba a ir al colegio al día siguiente y iba a tener unas ojeras de campeonato,subí las escaleras de puntillas sin hacer apenas ruido,cuando llegué a mi cuarto cerré la puerta con suavidad. Suspiré,”hoy ha sido un día muy bonito”pensé mientras me cambiaba,poniéndome el pijama y me metí en la cama,hoy de hecho,había sido uno de los mejores días de mi vida y...¿no podían ser todos los días así?,no entendía porque otros podían vivir sin apreciar la vida como lo hacia yo,yo debería sustituirlos,todo era injusto...se me escapó una lagrima pero me negué a llorar más,todo lo que me quedaba de vida debía de ser feliz para que mereciera la pena. Cuando me quedé dormida y soñé.
-¿te gusta tocar el piano?-me decía Leo.
-Si-respondí yo,estábamos en mi salón era totalmente de día y mientras que yo estaba sentada frente al piano,el estaba con una mano apoyada en el piano y la otra en mi mejilla,yo estaba roja de la vergüenza.
-¿porqué?-dijo el mirándome.
-pues...
-¿puede que la razón sea que yo te enseñé?-se acercó un poco más
-Si-el se agacho hacia mi rostro,solo para darme otro beso en la frente,suspiré ,yo quería que me lo hubiera dado en otro sitio ,cuando se estaba alejando se paró y se volvió a acercar:
-¿querías que te diera el beso en otro sitio?-le miré un poco avergonzada,parecía que pudiera leerme la mente.
-si...-dije poniéndome mas colorada si eso era posible...Entonces se acercó y me besó,no fue uno normal,mi cuerpo ardió primero y empezó a hacer cambios,después mi alma se volvió templada,ni apasionada ,ni fría,el dolor era intenso...mi cuerpo parecía quebrar cuando todo el dolor cesó,y me desperté. La alarma del reloj estaba sonando: A beautiful lie-30 seconds to mars. Eso me animó un poco después de la paranoia que había soñado porque 30 seconds to mars era mi grupo favorito:
-Sasha -me llamó mi madre abriendo la puerta-¿te has levantado ya?
-si...-dije restregándome las manos por los ojos. Me levanté y fui a por mi ropa.
-No,coge esto-me dijo ella dándome un uniforme,era bonito,una falda de cuadros escoceses azul marina y rayas rojas con el doble broche a un lado de la cadera,unas medias negras de lino hasta la rodilla,un polo azul marino con el emblema del colegio que era una rosa roja en el pecho.
-¡uaau! -dije sorprendida,yo siempre había soñado con uno de esos.
-me alegro de que te guste-dijo mi madre y dejó mis zapatos en el suelo-te voy preparando el desayuno,date prisa que solo tienes un cuarto de hora.
Me vestí en casi un segundo,la ropa me quedaba genial,me subí la falda por encima de la rodilla,seguramente todas las chicas hacían eso ¿no?,tampoco es que yo quisiera provocar,pero tampoco quería ser la rara,me miré al espejo,estaba un poco cansada,me había rayado bastante por el sueño,me cogí dos mechones de delante y los sujeté con horquillas en la nuca,así se me hacia más cómodo mirar.
Parecía una chica normal reflejada en un espejo,parecía una chica a la que una secta o algo por el estilo no se le había acercado...y eso me cambiaría la vida. Cogí mi ipod que era de color lila y los cascos a conjunto del mismo color después bajé.
En este capítulo pasan muchas cosas ,jeje,es bastante importante y conoce a Leo(L) y a Diana que aunque sea bastante presumida que le vamos a hacer...:)
un abrazo,Laura.

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